LENIN Y SUS MANERA DE HABLAR
Extraido del libro Stalin: Un mundo nuevo visto a traves de un hombre, Henri Barbusse.
Lenin solo pretendía persuadir a los que escuchaban, distribuir su convicción por dentro, no por fuerza, por el peso del contenido, no por la gesticulación y la danza del continente. Cabe, pues, decir que las actitudes oratorias que se le atribuyen en la imagen no son absolutamente justas y que nunca se ha agitado tanto como en sus estatuas.
El estilo sencillo y pleno que usaba Lenin para discurrir era el mismo que había adoptado Stalin instintivamente y del que no había de deprenderse nunca (incluso lo acentuó).Tampoco el pretendía, convertir la tribuna en un pedestal, y no aspiraba a ser "un gran vociferador" del tipo de Mussolini o Hitler, ni a imitar la histrionismo de los abogados como Alexandrov- que tan bien sabían impresionar a la retina, el tímpano y las glándulas lacrimales del auditorio, - o los balidos contagiosos de Gandhi. Era- y ha seguido siéndolo- más sobrio aun de palabras que Lenin.
Serafina Goppner que ha desempeñado un importante papel en la revolución, habla de la extraordinaria impresión que le produjo el discurso pronunciado por Stalin en abril de 1912 sobre la actividad del Soviet de Petrogrado (en el cual era el el único bolchevique). Era aquel "un brevísimo discurso en el que no faltaba nada". En el se exponía íntegramente toda la situación y era imposible suprimir o cambiar una sola palabra. Orajechvili hace notar también que "en un discurso de Stalin no se encuentra una gota de agua"